La Misión

0

Category :

Por fin volví a casa después de tanto tiempo. Lo primero que hice fue quitarme los zapatos y dejarlos por ahí tirados. Ya podía volver a hacer lo que quisiera. Inmediatamente me metí en la ducha. Ah, ¡cómo echaba de menos sentir la presión del agua como me gusta y saber ya de antemano cómo regular el agua para que esté totalmente a mi gusto! Había pasado más tiempo del que me parecía al principio.

Salí de la ducha, me puse un albornoz y me tiré boca arriba encima de la alfombra del salón, mirando el techo. Todo me daba vueltas todavía. La misión había acabado, de eso no había duda, pero quizás era pronto para decir si había salido bien o mal. Después de todo habíamos tenido que engañar a tanta gente...

Supongo que me asignaron en la misión por mi habilidad para reconocer patrones y mi capacidad de deducción, pero a la hora de tratar con personas es algo distinto. Cuando alguien miente te está dando una pista falsa y sacar conclusiones a partir de ahí es muy peligroso. Seguramente en algún momento habría actuado de forma distinta si hubiera sido consciente de cuándo se decía la verdad y cuándo no, pero es evidente que aún no estoy lo suficientemente entrenado en ese aspecto.

La verdad es que he tenido el placer de conocer a mentes muy brillantes en esta aventura, aunque quizás la que más me ha fascinado es la de mi compañero. Él era el jefe de los dos. Tenía mucha más experiencia que yo y era el que sabía siempre qué hacer de cara al resto de gente. Lo asumí sin ningún problema y me dejé llevar totalmente por lo que él dijera. Para algo era el jefe. De hecho, apuesto a que él si que sabe si la misión ha sido un éxito o un fracaso.

Pero ha sido todo muy extraño. Teniendo en cuenta toda la situación que vivíamos, si había alguien en quien pensaba que podía confiar era precisamente en él. Y, sin embargo, justo al final me ha demostrado que todo el tiempo he estado formando parte del grupo de personas engañadas, como el resto del mundo. Esto me ha chocado por la contradicción que ha supuesto, pero insisto, mis habilidades para detectar las mentiras de la gente son un poco pobres.

Personajes contradictorios los hay a porrones, pero a éste le tenía un respeto especial. Había sido mi guía estos últimos meses, llegué a conocerle bastante. Incluso me hizo prometerle que nos viéramos cuando todo acabara, pasara lo que pasara. De ahí mi sorpresa cuando anoche, en el aeropuerto, se despidió de mí y, con una de sus caras más serias, me dijo que ni se me pasara por la cabeza buscarle.

¿Qué quiso decir eso? Se abre un amplio abanico de posibilidades, algunas más lógicas que otras, aunque poco de todo este asunto tiene mucha lógica en realidad. Suponiendo que todo lo que diga es verdad, la explicación sería que entre los dos sucesos (su promesa y anoche) ha visto algo en mí que le ha hecho cambiar completamente de opinión. Esto puede ser comprensible, pero no he hecho más que seguir sus órdenes en todo momento, así que no sería justo que me juzgue por eso precisamente. También le conozco algo y sé que tiene una buena habilidad para mentir sin que se note, así que no es muy descabellado considerar que en uno de los dos momentos no ha sido sincero. Al menos así se justifica la contradicción. Lo primero sería pensar que no decía la verdad al principio. ¡Maldita sea! Tiene sentido no revelar información tan personal a un desconocido, por mucho que toque trabajar juntos. Le dije dónde vivo y todo, quizás fue un error. Su historia era bastante creíble, pero claro, la tendrá preparada desde hace años. Supongo que ganarse mi confianza de esa manera era clave para el buen funcionamiento de la misión, pero no podía jugarse su seguridad tan a la ligera. Y si no es eso, vamos a la segunda posibilidad: lo que me dijo anoche no iba en serio. Tal vez se dio cuenta de todo lo que sabíamos el uno del otro y ahora mismo lo más prudente por precaución era alejarnos hasta que todo se calme. Entonces lo hizo por protegerme, aunque podía haber sido algo más claro. O quizás era una broma, y sabiendo lo que hago quería ponerme en la situación en la que estoy ahora mismo analizándolo todo para entender el problema, salvo que no tiene solución por ser una broma. Otra opción es que en ningún momento haya sido capaz de decir la verdad. Después de todo por lo que ha pasado no me sorprendería que haya acabado tan enfermo. Pero caray, qué complicado es todo.

Y hasta aquí soy capaz de pensar. Mi trabajo consiste en evaluar todos los posibles escenarios, y él ya se encargaba de tomar decisiones y elegir el más adecuado para actuar, por eso formábamos buen equipo. No me echo nunca atrás al hacer una promesa, y ésta tenía como condición "pase lo que pase", así que la pretendo mantener en pie. Él sabrá lo que está haciendo.

En fin, creo que lo mejor que puedo hacer ahora es precisamente no hacer nada y dejar que todo vaya sucediendo por sí solo. De hecho, ahora mismo me voy a quedar aquí tirado hasta que una fuerza mayor intente levantarme.


Primera botadura

0

Category :

"Bien, pensé yo, ahora ya puedo enfrentarme tranquilamente con la muerte y la destrucción, y que el demonio se lleve al que se rezague."